Saber elegir una casa para tu perro es muy importante, sobre todo si pasa gran parte del tiempo en el exterior de las viviendas. En verano, les permite tener un sitio confortable a la sombra y, en invierno, se hacen indispensables, puesto que allí los perros encuentran refugio y protección contra el mal tiempo.

Veamos cómo elegir una casa :

A la hora de elegir una casa de perro y asegurarnos de que sea confortable para nuestro peludo, lo más importante es tomar bien las medidas.

La regla general, debe permitir que el perro entre, pueda darse la vuelta y recostarse en el interior. Si es más pequeña, será incómoda, y si es mucho más grande, resultará fría en los meses de invierno. Si tienes dos perros que se llevan bien, pueden compartir la misma caseta y así darse calor mutuamente, ¡y también se harán más compañía!

A la hora de valorar las medidas de una casa, debemos tomar como referencia las medidas del perro que la vaya a utilizar y, en base a estas, elegir la caseta con el tamaño más adecuado para él.

A continuación, toma nota para hacer una compra sin equivocaciones:

Altura a la cruz: La entrada de la casa no debe ser inferior a ¾ partes de esta medida. No obstante, si es demasiado amplia, se perderá calor; por lo que tampoco conviene que sea mucho más grande.
Largo (sin contar la cola): El ancho y el largo de la casa deben ser iguales o un 25% superiores a esta medida para que el perro se mueva cómodamente en el interior. Por ejemplo, si el largo del perro es de 50 cm, el interior de la caseta debe medir entre 50 y 63 cm de largo y de ancho.
Altura a la cabeza: La altura total de la casa debe ser entre un 25 y un 50% más alta que esta medida. Es decir, si el perro mide 60 cm de altura a la cruz, la parte más alta del techo debe estar a 75 o 90 cm del suelo.
Como ves, las medidas para una casa de perro grande no serán las mismas que las medidas para una casa de perro mediano o pequeño. Por eso recalcamos la importancia de tomar como referencia las medidas antes de elegir la casa de tu peludo.